jueves, 7 de octubre de 2010

Estrellas del paraíso

A mi padre

Vive la noche en mis ojos de luna despierta
recorriendo el misterio de lo inconcebible

Vive mi mundo en las estrellas del infinito
a través del sueño y el amor por lo eterno

Vivo en la profundidad de los océanos
atravesando la espesura del tiempo
en busca del esplendor de las luces

El sol calienta mis pupilas de nieve
y la luna enfría la llama de mi corazón

Día y noche, dentro y fuera de mí mismo,
avanzan y se ocultan calmando la herida
del sordo vacío de la existencia

Alguien canta a lo lejos pronunciando mi nombre:
¿es Dios, la muerte, la nada, soy yo mismo?

Alguien canta a lo lejos detrás de la luna
en algún lugar del infinito
donde los hombres no existen
y el tiempo y el espacio se expanden
hacia el frío incontenible

Vuela la razón por ese eco funesto
y oculta su miedo en la esperanza de que el sol
nunca se dé por vencido

Y nunca lo hará, porque está dentro de ti
y tú puedes invocarlo

Nunca lo hará, te lo juro,
porque no hay noche que venza
a la luz de la esperanza

Canta, canta a la luz
y verás el paraíso
más allá del espacio,
allí donde el corazón
vuela con el aire

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